CHAKRAS

Los chakras atraviesan el sistema circulatorio corporal completo. En un nivel más microscópico se encuentran estos canales que conectan todos los puntos vitales del cuerpo; son pequeños caminos que viajan entre las células.

El ninja va entrenando y modelando sus chakras. Pero si estos canales circulatorios de energía se dañan, su disfunción excede las capacidades de cualquier médico para poder rehabilitarlos.

El chakra viaja a lo largo del cuerpo y alrededor de los órganos internos. Este sistema incluye los tenketsu 361, que son puntos minúsculos a través de los cuales el chakra fluye. Cabe destacar que el flujo del chakra puede ser aumentado o disminuido manipulando estos tenketsu.

El sistema circulatorio del chakra es solamente visible gracias a la utilización de la técnica del Byakugan, mientras que el Sharingan permite observar el flujo general del chakra pero no el sistema interno en sí mismo.

Ciertos estilos de ataque como el Byakugan y el Hyuuga Juuken, ejecutados con el puño, permiten que los ninjas expulsen su chakra por las manos hacia el tenketsu de sus opositores.

Esta presión hará que el tenketsu del adversario se cierre y bloquee el flujo de su chakra. Con varios tenketsu cerrados, el flujo del chakra de los ninja será tan pequeño que se eliminará su capacidad de utilizar jutsu.

Además, dado que el sistema de chakras atraviesa el cuerpo por completo, la presión ejercida contra el tenketsu también dañará los órganos internos próximos al golpe.

Dado que un ninja no puede entrenar y consolidar sus órganos internos, tales ataques pueden resultar devastadores.

Enfocar una cantidad igual y constante de chakra a una porción del cuerpo de los ninjas permite incluso que éstos caminen superficies verticales.

Además, expeler una cantidad continua de chakra por los pies, proporcional a su peso corporal, permitirá que el ninja camine sobre el agua sin inconvenientes. Un ninja hábil podrá también enfocar los chakra hacia miembros específicos, que aumentarán la energía y la fuerza de los músculos.

El chakra del cerebro y los órganos sensoriales son también el blanco primario del Genjutsu. Se desarrolla el Genjutsu cuando un ninja amplía su chakra atravesando el sistema nervioso cerebral de su adversario con el objetivo de controlar el chakra de su mente, afectando así sus cinco sentidos.